Reto módulo 5

Para este último reto, de entre las 5 opciones posibles, me lanzo a la piscina con la opción 2 mezclada con la 3.

Es decir, arte para la igualdad con humor!!!

Ahí va mi poesía:

¿Son superiores los hombres a las mujeres?

Vives en tu cueva entre cuatro paredes.

¿Crees que son inferiores las mujeres? 

Aquí van estas lineas para que por fin te enteres.

¿No te has puesto nunca las gafas violeta?
Yo te las presento mientras finjo ser poeta.

Puedes usarlas aunque no tengas tetas,
sólo es necesario poner las dos orejas.

Las gafas violeta son gratuitas,
y una vez que te las pones ya no te las quitas.

Si aún no diferencias sexo de género,
búscalo ya en Google no esperes hasta Enero.

Sexo es físico y somos diferentes,
el género en cambio impuesto por las antiguas mentes.

Ni izquierdas ni derechas,
ni feministas ni machistas,
luchar por la igualdad te acepta si te alistas.

Vamos acabando está reflexión,
ya quedó muy atrás el hombre de Cromañon.

El mundo cambia, súmate a la realidad,
con tu ayuda o sin tu ayuda venceremos a la desigualdad.

Para finalizar querría reservar las últimas líneas para agradecer a todos aquellos que han hecho posible esta experiencia y agradecer también a todos aquellos que habéis (hemos) participado en ella. Gracias. 

Reto semanal módulo 4. ¿Qué puedo hacer yo?

Llega el verano y también el final del módulo 4 de esta experiencia.

Hemos trabajado ya sobre la socialización de género, sobre políticas de igualdad y transversalidad, sobre la Herstory y en este último módulo sobre las administraciones públicas.

La tarea de esta semana es reflexionar sobre qué puedo hacer yo desde mi condición de empleado público por la igualdad entre mujeres y hombres.

Las personas que formamos parte de la administración pública por suerte, en la mayoría de puestos a desempeñar estamos en contacto con personas, atendiendo a la ciudadanía.

Trabajamos por y para las personas administrando muchas de sus gestiones cotidianas y en otros muchos casos ofreciendo servicio. 

En mi caso trabajo como examinador de tráfico en la Jefatura Provincial de Tráfico de Barcelona. 

Una de las posibilidades que mi puesto ofrece y con la que estoy agradecido es la posibilidad de formarme y participar en distintas acciones formativas. 

En este curso he recibido una herramienta valiosísima que estoy aprendiendo a utilizar y que me permite trabajar con las personas que optan a un permiso de conducción de manera más justa y encaminada hacia la igualdad de oportunidades. No hay jornada de trabajo que no empiece con mis gafas violeta puestas y otro par en la mochila para regalar a cualquier persona que quiera utilizarlas y/o las necesite.

No dejarse influenciar por la socialización de género e introducir el lenguaje inclusivo a la hora de dirigirse a la ciudadanía o a la plantilla de la Jefatura es una de las primeras medidas sencillas que puedo introducir en el desarrollo de mis funciones.

Compartir con mi entorno familiar, amistades y personas con las que trabajo todo lo aprendido, es también un paso importante para que el mensaje pueda llegar a más oídos y que más personas reflexionen y logremos vencer a las desigualdades y los estereotipos.

Reto modulo 3 La quitanieves

Vamos a ello. ¡A transversalizar!

Este reto semanal es en el que más dificultades he tenido. La dificultad la he encontrado al visualizar el video de “la quitanieves”, video que no he entendido y me ha descolocado por completo sobre lo que yo entiendo o lo que yo creo haber aprendido.

En primer lugar me gustaría comentar qué es para mí la transversalidad de género.

A menudo se argumenta que las políticas públicas son neutras respecto al género porque se dirigen a toda la población por igual, sin hacer distinciones entre mujeres y hombres. Sin embargo, si mujeres y hombres parten de una situación y posición desiguales, cualquier actuación pública que no lo tenga en cuenta, sólo conseguirá perpetuar estas desigualdades e incluso agravarlas. 

La transversalidad implica incorporar la perspectiva de género en todas las políticas públicas, en todas sus fases de actuación (diagnóstico, planificación, seguimiento y evaluación) y, por tanto, implica un cambio de mirada en los modos de trabajar y en la cultura institucional.

La transversalidad de género es una estrategia eficaz para el avance en la consecución de la igualdad entre mujeres y hombres en las políticas públicas y supone contribuir a eliminar desigualdades de género, corregir procedimientos y métodos de trabajo e impulsar tendencias de cambio social. No se trata de una aplicación esporádica de medidas puntuales sino de la aplicación de políticas transversales de género que supongan un cambio estructural y social.

Entiendo que las políticas específicas dirigidas a mujeres, son necesarias pero no son suficientes. Estas políticas resuelven problemas específicos resultantes de una situación de desigualdad, pero a corto plazo y sobre áreas específicas pero no afectan sobre el proceso político como un todo.  Para mi, el mainstreaming o la transversalidad, supone la integración de las políticas específicas de igualdad de oportunidades en las políticas generales de forma permanente.

La definición o explicación sobre el tema que más me ha gustado de todas las que he consultado o encontrado, ha sido la siguiente:

El concepto de “transversalidad o mainstreaming de género” surge a raíz de la III Conferencia Mundial sobre las Mujeres (Naciones Unidas, Nairobi, 1985). Esta forma de abordar el trabajo por la equidad entre los sexos trata de complementar la política específica de igualdad y las medidas de acción positiva dirigidas a las mujeres, y establece la necesidad de un eje o directriz de igualdad en todas las políticas y sectores, incorporando la perspectiva de género en todas las fases de la actividad política: diagnóstico, planificación, ejecución y evaluación.

El mainstreaming, o integración de la perspectiva de género en todas las políticas, planes y programas, se contempla como un medio de cambiar las estructuras de la sociedad, ya que éstas contribuyen a sostener y, en muchos casos, a reforzar, la segregación entre mujeres y hombres.

Continuamos.

En esta segunda parte del trabajo quiero tratar el tema de la conciliación y exponer mis ideas sobre qué sería para mi una política específica dirigida a mujeres y qué sería para mi la transversalidad y una medida exitosa.

En muchas situaciones, las mujeres tienen mayor dificultad para conciliar la vida laboral y familiar debido en parte a la socialización de género. Nuestra sociedad le otorga a la mujer la tarea del cuidado de los hijos y de las labores del hogar. Por ello debe sacrificarse, a veces renunciando a un trabajo por no poder cuadrar horarios, y otras aceptando el trabajo pero asumiendo una carga excesiva de tareas y un estrés inhumano. 

Una posible solución sería que las empresas reservaran un “horario especial para mujeres” retrasando la hora de entrada para que puedan llevar a los niñ@s al cole, y anticipando la salida para que puedan recogerlos a la salida del colegio y corran para casa a hacer la comida.. Aparentemente, sería un gran éxito y un gran avance ya que esta solución específica permite que las mujeres puedan acceder a corto plazo a un empleo y no quedarse apartadas del mundo laboral. 

¿Esto es igualdad?No

¿Esto es transversalidad de género? Rotundamente no.

Para mí la transversalidad sería que la sociedad y las políticas públicas le otorguen el cuidado de los hijos a mujeres y hombres por igual, aportando soluciones como guarderías públicas de calidad o adaptar los horarios de trabajo, independientemente del sexo de la persona, para que no coincidan con los horarios escolares. Un ejemplo de medida exitosa y transversal que sí que ayuda a que la mujer no abandone el mundo laboral es por ejemplo el permiso de paternidad equiparado o fomentar el principio de la presencia equilibrada de mujeres y hombres.

Este ejemplo me sirve para enlazar con el inicio del documento donde mencionaba  el video de ”la quitanieves”.

En el video se expone que las mujeres caminan, las mujeres van en bicicleta, las mujeres utilizan el transporte público,las mujeres aparecen en el video empujando un carrito de bebé, los hombres van en automóvil, los hombres van a grandes espacios de trabajo.

Según el video, las vías de circunvalación, calles de mayor tamaño, especialmente aquellas que conducen a espacios de trabajos grandes,son zonas masculinas y se les daba prioridad, las paradas de autobús y los caminos para peatones se entiende que son para mujeres. Al dar prioridad a la limpieza de las zonas de mujeres el municipio se volvió más igualitario.

Me parece genial que el municipio tome medidas específicas para facilitar la vida de las mujeres, pero lo que en ese ejemplo se expone está muy lejos de la transversalidad. Para mí, transversalidad sería que las políticas públicas se enfoquen en que mujeres y hombres visiten por igual todos esos lugares y disfruten de la igualdad de oportunidades. Mujeres y hombres en grandes trabajos, en automóvil, en bicicleta, en parques, caminando, caminando juntos por donde “la quitanieves” además de nieve, quite también  la desigualdad, en invierno, primavera, verano, otoño y para siempre.

No es una quitanieves lo que necesita el municipio del video, necesita que la transversalidad cambie las estructuras de la sociedad.

https://www.youtube.com/watch?v=v9bnXSJCBCs

8M Reto módulo 2

En estos días de coronavirus y "políticos-virus" parece que está de moda el 8M. Sobre esta fecha quiero profundizar y dedicarle mi reto de aprendizaje del módulo 2.

El reto de esta semana consiste en trabajar sobre alguna figura, evento o hecho histórico relevante en la HERstory.

¿8M? Seguro que te suena esa fecha. Exacto, !acertaste! Es la fecha del día en que los museos, bares, cines, lugares de culto,locales acondicionados para un mitin político, estadios de fútbol y muchos más, estaban abiertos y abarrotados en nuestro país, como en cualquier otro domingo. Por supuesto también iban completos los diferentes tipos de transporte público de nuestras ciudades. Pero como decía unas línea más arriba, acertaste, el 8M es el día ese en que se celebró por todas nuestras ciudades y pueblos una marcha y/o manifestación de mujeres que nos condenó a sufrir la pandemia del coronavirus.

¿A qué se debe que esa multitud de mujeres (!!!incluso algunos hombres también!!!) salieran a la calle justo ese día y nos condenaran a todos? Qué lástima si la edición de este año se recordase por un enfrentamiento político sobre el virus y no por lo qué realmente significa ese día.

El 8M, ahora en serio, se celebra el Día internacional de la Mujer Trabajadora.

El Día Internacional de la Mujer Trabajadora conmemora la lucha de la mujer por su participación dentro de la sociedad, en pie de emancipación de la mujer y en su desarrollo íntegro como persona.

Se conmemora el 8 de marzo y aunque no siempre se ha celebrado en la misma fecha, fue institucionalizado por las Naciones Unidas en 1975 con el nombre de Día Internacional de la Mujer, aunque el origen de este día es bastante anterior ya que en el año 2011 se celebró su centenario.

En 1910, en la II Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas reunida en Copenhague, se reiteró la demanda de sufragio universal para todas las mujeres y, a propuesta de Clara Zetkin, se proclamó el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer

Como consecuencia de la decisión adoptada en Copenhague el año anterior, el Día Internacional de la Mujer se celebró por primera vez el 19 de marzo de 1911 en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza, con mítines a los que asistieron más de un millón de personas, que exigieron para las mujeres el derecho de voto y el de ocupar cargos públicos, el derecho al trabajo, a la formación profesional y a la no discriminación laboral. Desde entonces se ha extendido a otros países y continentes.

Como curiosidad, aunque el Día Internacional de la Mujer era celebrado el 8 de marzo en muchas partes del mundo, no lo fue en Estados Unidos hasta 1994, cuando Beata Poźniak, una actriz inmigrante de Polonia, reivindicó, mediante solicitud al Congreso de Estados Unidos el reconocimiento del Día Internacional de la Mujer en los Estados Unidos el 8 de marzo.

Investigando más sobre este día también me parece interesante compartir con vosotros que:

En España, a partir del 8 de marzo de 1910, la mujer accedió a la Enseñanza Superior en igualdad de condiciones que el hombre, cuando se aprobó una real orden que autorizó “por igual la matrícula de alumnos y alumnas”, poco después de que Emilia Pardo Bazán fuera nombrada consejera de Instrucción Pública. Bien es cierto que antes, las pioneras de finales del siglo XIX habían comenzado a ir a la Universidad pues no existía ninguna ley en contra. No estaba prohibido simplemente porque nadie había pensado, jamás, en que una mujer quisiera estudiar y, mucho menos, que lo necesitara para ser una buena madre y esposa.

Hubo casos anteriores:

• En 1785, María Isidra de Guzmán, conocida como la doctora de Alcalá, obtuvo el grado de doctorado en la Universidad de Alcalá de Henares.
• En 1849, Concepción Arenal se disfrazó de hombre para estudiar Derecho en la Universidad de Madrid.

Sin embargo en 1882 una real orden suspendió «en lo sucesivo, la admisión de las Señoras a la Enseñanza Superior». Seis años después, en 1888, otra real orden acuerda «que las mujeres sean admitidas (...) como alumnas de enseñanza privada» pero con autorización. Tenían que pedir permiso al Ministerio de Instrucción Pública y conseguir que cada uno de los profesores firmara el impreso de matrícula comprometiéndose a garantizar el orden en el aula.​ De modo que el 8 de marzo de 1910, por fin las mujeres pudieron matricularse en igualdad de condiciones que el hombre. Fecha ésta, bastante temprana en comparación a otras naciones europeas; la mujer no accedió a la Universidad de Cambridge, en Inglaterra, sino hasta 1947

Sexo, género y conducción. Reto módulo 1

Sexo y género ¿son lo mismo?

Es una pregunta que quizás no me haya o no te hayas hecho nunca, o a la qué nunca le hemos dado importancia.

Pocos pasos he recorrido de esta experiencia formativa para la gran cantidad de "nuevos" conceptos aprendidos. Y digo "nuevos" no porque lo sean, llevan existiendo siglos, pero muchos como yo, o quizás tú, que estás leyendo esto, o la gran mayoría de la sociedad, no nos hemos dado cuenta. Hemos vivido con ello sin saber que existían o pensando que no eran diferentes, que eran sólo uno.

No diferenciarlo nos ha llevado, no ahora, sino desde hace siglos, a darle importancia sólo al primero creando a lo largo de la historia una desigualdad injusta y subjetiva.

El reto del primer módulo de esta acción formativa trata de exponer casos o ejemplos de desigualdad fruto de la socialización de género.

En mi trayectoria profesional llevo ya 12 años dedicados a la formación de conductoras y conductores, 10 años como formador vial y los dos últimos años como examinador de tráfico. ¿He encontrado algún tipo de desigualdad en el proceso desde que se forma una persona en la autoescuela hasta que supera el proceso de formación superando el examen oficial de tráfico? La respuesta es no, no existe ninguna desigualdad oficial en el trato de las personas, ni por parte de la autoescuela ni por parte de la Administración durante el proceso. Pero la desigualdad existe, y existe en todas partes, hasta en los actos más pequeños y pasa desapercibida por delante de nuestros ojos.

En estos 12 años aún no me he encontrado el caso de ninguna persona que necesite o utilice las características biológicas propias de su sexo para desempeñarse en la tarea de conducir un vehículo o a la hora de adquirir los conocimientos teóricos necesarios para la obtención de un permiso. Si para conducir un vehículo no se necesita ningún requisito biológico característico del sexo masculino o femenino, ¿por qué llevamos años pensando que conducir es cosa de hombres o que las mujeres no están hechas para eso de conducir ?

Conducir es una tarea compleja que requiere de diferentes funciones psicofísicas, cognitivas y de otros muchos factores, presentes por igual en ambos sexos. Si existen falsas creencias o estereotipos sobre conductores y conductoras, todo proviene conscientemente o inconscientemente del problema de la socialización de género a la que llevamos años expuestos.

Como decía antes, la desigualdad oficialmente no existe, ya que toda persona es tratada igual por el centro de formación o por la Administración independientemente de su sexo. Pero la desigualdad de género se extiende peligrosamente y se oculta tras la falta de desigualdad oficial.

Esta desigualdad de género depende de nosotros, de las personas,de la sociedad que hemos construido y debemos reflexionar y acabar con ella aunque sea difícil, difícil porque está oculta y muchas veces no somos conscientes de que la fomentamos nosotros mismos.

Esta reflexión me lleva a proponeros las siguientes preguntas:

¿Crees que a tu hijo o hija le va a costar más o menos obtener el permiso de conducir por ser chico o chica?

Cada uno de tus hijos/as tiene una características personales propias, puede que a alguno de ellos le  cueste más, menos o lo mismo obtener el permiso de conducir. Pero ninguna de las características biológicas que los definen como hombre o mujer intervienen en el proceso. Si crees que a tu hija le va a costar más, estás influenciado por la socialización de género.

¿Crees que los hombres tienen mayor facilidad para conducir así porque sí?

Los hombres no tienen ninguna característica especial que los haga conductores innatos o que les dé facilidad para aprender a conducir. Cierto es que hace años la socialización de género propiciaba que los padres enseñaran en un descampado a poner alguna marcha del vehículo a sus hijos varones y estos fuesen al examen con alguna experiencia previa. Actualmente estas prácticas ya pocas veces se realizan y la dificultad del examen actual es tal, que no se obtienen ninguna ventaja por saber poner primera o segunda. Si crees que por ser hombre vas a conducir mejor, estás influenciado por la socialización de género y deberías disminuir tu dosis diaria de reguetón.

¿Tratará de forma distinta el examinador a un aspirante en función de su sexo?

Como comentaba anteriormente, oficialmente se debe tratar de la misma manera a toda persona independientemente del sexo de esta. Si alguien cree que su sexo puede incidir en la forma de ser tratado, tanto en aspectos negativos como positivos, desgraciadamente no le puedo quitar la razón, ya que hasta aquí también llega la desigualdad de género. ¿Me tratarán con más cariño si soy mujer o pensaran que soy tonta? ¿Al ser hombre ya estoy aprobado no? ¿Si voy mejor vestido o vestida apruebo no? Defiendo al colectivo examinador al que pertenezco, pero siendo todos personas no niego que si el alumno está influenciado por la socialización de género, también lo esté sin ser consciente el examinador.

Soy mujer, ¿me costará mucho aprender a conducir no?

Seguramente como mujer has tenido distintas dificultades a lo largo de tu vida, pero la mayoría no habrán sido por las características biológicas que te hacen ser mujer. Muchas habrán sido por como la sociedad te ha colocado en el rol de parte débil y en otras muchas has sido tú quién se infravalora por la socialización de género. Como ser humano eres capaz de aprender a conducir y de hacer miles de cosas como cualquier otro ser humano.

Empecemos

Hola, soy Xavi Mateos, examinador en la Jefatura provincial de Tráfico de Barcelona. Creo este blog como diario de aprendizaje del curso sobre igualdad entre mujeres y hombres. Espero reflejar aquí el camino recorrido en esta experiencia y aportar todo lo aprendido. Empecemos.